PRO MULTIS ≈ + MULTIS


El Misal y el Leccionario son libros sagrados que rigen la liturgia. Acabamos de estrenar un nuevo Misal, del que se nos dice que ha corregido al anterior según un criterio de mayor literacidad, lo cual explicaría el cambio acontecido en las palabras de la consagración. Por otra parte, el Leccionario también fue renovado hace unos meses aunque aún no se ha divulgado el por qué.
Ha transcurrido más de un año desde que Roma dio el visto bueno al nuevo Misal español, demora aprovechada para, al menos en Toledo, intensificar la formación bíblica de los fieles aunque, desgraciadamente, las crecientes dificultades materiales de la crisis no hayan propiciado la asistencia a esas charlas.
El Pro Multis fue recomendado por Benedicto XVI en sus primeros años como Papa. Su intención volvió a ser explicada muy poco antes de su renuncia en una carta que escribió a los obispos de lengua alemana e iba en la línea de su programa pastoral. Recientemente ha salido un libro sobre la vida del Papa Emérito en el que él mismo responde a preguntas sobre la Iglesia y sobre su aportación como Papa y en el que encontramos también luz sobre estos cambios recientes:
«  -Se quejaba Vd. [siendo Prefecto] del empobrecimiento y mal uso de la liturgia. Al fin y al cabo, la liturgia es, a su juicio, el eje y quicio de la fe; de ella depende el futuro de la Iglesia. Si esto es así ¿por qué ha hecho tan poco en este terreno siendo Papa? Vd. tenía todo el poder para obrar cambios.
-Institucional y jurídicamente no se puede hacer tanto. Lo importante es que surja una visión interior de qué es la liturgia, de lo que realmente significa, que las personas lo aprendan desde dentro…se trata…de que la liturgia colme la Iglesia y sea celebrada desde dentro. Pero eso no se puede imponer por decreto. »   [Pg. 249]
Si estamos de acuerdo con esta reflexión del Papa Emérito tendremos que pensar que la introducción en este momento del pro multis responde, en cierto modo, a una maduración del pueblo de Dios en ese sentido profundo de la vivencia de la fe que es la liturgia. Pero, ¿cuándo y cómo se ha dado esa maduración? En el libro antes citado, en la página 263 hay una pista también para esta cuestión:
«  -En su gran discurso de 2010 en Friburgo, reclamó Vd. una “desmundanización” de la Iglesia, necesaria para que la fe pueda volver a desplegar sus principios activos. Con ello no se refiere a un alejamiento de los hombres, de la caridad cristiana, ni a un abandono del compromiso social y político, sino al alejamiento del poder, del dinero, de las falsas apariencias, del engaño y el autoengaño. El discurso se malinterpretó reiteradamente, en parte de forma del todo deliberada, incluso por miembros de la Iglesia. ¿Cómo pudo pasar eso?
-El término “desmundanización” le resulta, por lo visto, muy extraño a la gente; de ahí que quizá no fuera del todo acertado colocarlo de ese modo en primer plano. Pero creo que el contenido de la afirmación era suficientemente claro y que quien quiso entenderla la entendió.
-Era una afirmación revolucionaria.
-En efecto.
-Se trataba de seguir ofreciendo resistencia, de resultar incómodos, de no adaptarse, de volver a mostrar que el cristianismo lleva una cosmovisión asociada específica que trasciende con mucho todo lo vinculado con una visión del mundo puramente mundana y materialista e incluye el misterio de la vida eterna. Lo que Vd. pedía era una nueva veracidad y la autenticidad de la vida cristiana, o sea, la verdadera y decisiva reforma de la Iglesia. (…)[i]
-Exacto, ahí se da una diferencia. »   
En conclusión: Si se ha dado esa maduración, vamos hacia un reforzamiento de la presencia cristiana en la sociedad por el vigor de la fe de sus miembros y si no, estos cambios –los del Misal y el recorte del Leccionario- estarían indicando una vuelta a la fe de los primeros tiempos, cuando era necesario un tutor que aleccionase a los fieles combinando adecuadamente la amenaza del infierno con el premio del cielo, disponiéndolos así para el advenimiento de la libertad. Si esta segunda hipótesis fuera cierta, el cambio efectuado en la liturgia se expresaría adecuadamente con la ecuación:
Pro Multis+ multis








[i] Con Francisco se puede entender esto que con Benedicto XVI no se entendía y a partir de ahí dar sentido al resto de esta excelente entrevista.

Comentarios

Entradas populares de este blog

¡LUZ Y TAQUÍGRAFOS!

ALUMNOS

PROVOCACIÓN (publicado en agosto del 22, y revisado después)