EL MOLINERU

Necesito una metáfora para este artículo. ¿Quién vende metáforas? Sé que se venden tesis, argumentarios, ideologías, etc. pero metáforas no. El que tiene alguna buena, intenta como sea sacarle partido para sí mismo, porque la metáfora es un signo identificador muy potente, y andamos muy necesitados de decir que somos quien somos. En fin, como en el famoso soneto de Violante, me he metido en harina para sacar adelante este artículo...
"Diz que ye molineru y que gana cuanto quier..." forma parte de la canción "Soy de Verdicio", del cancionero asturiano, y el tal personaje se quiere casar con una moza hermosa de cerca del Cabo de Peñas...
¡Qué felicidad verse por fin casado! ¡Qué orgullo! ¡Qué tranquilidad! ¡Qué descanso para el alma!...
Ciertamente que el matrimonio proporciona todas esas buenas condiciones a los esposos. Y por algo es el mejor invento de Dios; el Cual, viendo que al varón no le convenía estar solo, le quitó un hueso, por hacerlo más blandito, y le dio una compañera semejante a él, y ambos a Dios: "Hombre y mujer los creó...a su imagen y semejanza".
"Creced y multiplicaos... y dominad la Tierra". Pero un dominio según Dios... ese Dios -Dominus- que se abaja hasta la muerte para que el Hombre le conozca y encuentre el camino de la felicidad. Y si el proyecto estrella de Dios se ve frustrado no es por culpa del invento, que es genial, sino por nuestra mala cabeza. Fíjense sino en un detalle del intríngulis de ese formidable diseño de nuestra naturaleza: el ser humano es el único ser de la creación que copula de frente... sí, para que sea evidente que no somos como los animales, sino que tenemos alma y que nuestra unión es de cuerpo y alma, de tal manera que al unirnos conyugalmente tengamos presente esa condición de nuestra existencia y nos ajustemos a ella.


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