LADRONES DE TIEMPO
![]() |
Caritas Christi urget nos |
Contexto de este artículo:
El éxito está en ir de fracaso en fracaso sin ceder al desaliento.
Terror viene de "tierra", y, como ninguno somos ángeles, todos tenemos mucho de terroristas.
Los medios de comunicación -sin excepción- no son servicios públicos, sino que tienen dueño. Lo que nos llega a través de ellos favorece exclusivamente sus intereses. Es mejor 'no enterarse de nada' que vivir creyéndonos informados; aunque hay otras opciones.
¿Quién tiene la culpa de lo que está pasando en España, en Europa y en el Mundo en general?
Yo, por supuesto. Sí, yo, porque burlándose como están de mí y de mis antepasados, que se dejaron la piel por darme un futuro, sigo viviendo como si no pasara nada.
Yo, por supuesto. Sí, yo, porque burlándose como están de mí y de mis antepasados, que se dejaron la piel por darme un futuro, sigo viviendo como si no pasara nada.
¿Contra quién tengo que protestar? Contra nadie. Se cazan más moscas con un dedal de miel que con un barril de hiel. La vía es manifestar con tu ejemplo que existe una forma de vida mejor que la actual. Me explico:
Hoy degollaron a un cura. Mal hecho. Pero está ya en el cielo y vivió 86 años. ¡Bendito sea Dios! Yo anduve errante hasta que 'me encontró' la senda buena. Llevo años caminando por ella y sé que es buena porque cada vez soy más 'feliz' (ojo con esto, no es que yo no tenga dificultades). Si viene alguien y me quita la vida como al Padre Hamel ¡bendito sea Dios de nuevo! ¡el tal asesino, pobre desgraciado, me habrá llevado al cielo por un atajo!
Como soy docente tengo dos meses de vacaciones y me traslado de Toledo a Asturias en verano ¡qué chollo! Pero me he propuesto vivir cristianamente, así que, después de gastar mis últimos cinco veranos en arreglar la humilde casa donde nací, ahora puedo invitar a familias amigas a descansar un poco de la fatiga del calor. Ayer llegó la primera, y como era Santiago Apóstol fuimos a Covadonga. ¡Qué celebración tan preciosa en la Gruta! Un grupo de libaneses de rito maronita entonaron algunas bellas canciones, haciéndonos palpar la universalidad de nuestra fe. Nuestros chicos, cinco en total, al principio remisos con el plan del día, salieron contentos de la cueva; y entonces les señalé la lápida de la verja con las palabras de San Juan Pablo II, que decía que allí, en el 711, parando al Islam, la fe cristiana había iluminado formas de vida súper-fecundas, inspiradas en la Buena Noticia [la de un Dios, Padre bueno, que mandó a su hijo encarnarse, y que obediente Éste, vino al mundo, y vivió como uno de nosotros pero sin pecar, por lo que fue perseguido y asesinado, pero, por su bondad, resucitado de la tumba; y que, por tanto, está vivo aún hoy, y sigue indicando a los hombres sencillos lo que deben hacer para no desperdiciar su vida]. A la mayor del grupo, una adolescente de 17 años, muy preocupada como es normal por su imagen, le dije que gracias a Jesucristo no tenía ella que llevar la cara tapada con un velo; y que merecía la pena defender esos derechos, incluso con la propia vida.
Emocionados por la misa, y sintiéndonos elegidos al habernos enterado de que podíamos subir a los lagos en coche por ser la fiesta de Santiago, comenzamos el ascenso entre brumas. Yo iba rezando para que mis amigos pudieran gozar del espléndido paisaje que desde allí se divisa, pero no pudo ser: la niebla era tan densa que no se veía a diez metros. De camino hacia el lago Enol por la senda pavimentada, me contó Ester el argumento de La Historia Interminable: Un mundo en el que unos pocos se fumaban el tiempo que les robaban a otros. Yo la escuchaba con la musiquilla de fondo de mi perplejidad sobre aquella 'jugada' de Dios (que aún con la miel de la misa en los labios nos estaba haciendo pasar ahora el 'mal trago' de no ver nada, de estar de pronto sumidos en la oscuridad, envueltos en una nube) ¿Nube?...
Brilló de pronto la luz para mí y comprendí qué me quería decir Dios con aquella, aparentemente, mala experiencia.
La nube -la red- representa el placebo que se nos intenta hacer tragar como indispensable, el soma del 'Mundo Feliz' que popularizó Huxley. Vemos cómo los móviles tiran de nuestros hijos, y nos preocupa, porque nos damos cuenta de que eso les está robando el tiempo, y no sólo el tiempo, sino la vida misma, y el alma. Esa mediación de la felicidad es un fraude, y una imposición violenta y destructiva.
Dios, en cambio, no engaña; y, como Padre amoroso, siempre está enseñándonos. La Santina nos había acogido como una madre tierna, y, acto seguido, fuimos absorbidos por 'la nube', pasando de una luz esplendorosa a la más abrumadora oscuridad. Pero ese contratiempo se convirtió en una enseñanza, una metáfora para nuestro tiempo. De camino a Covadonga en la furgo yo había contado que hay un pueblo en la Maragatería donde sirven el cocido empezando por la carne y terminando por el caldo, y que eso venía del tiempo de la Reconquista, cuando los ataques eran por sorpresa y urgía estar bien alimentados. Y veo claramente que ahora estamos en la misma situación: Los mercaderes -señores de negro- engañan el hambre de felicidad de nuestros hijos dándoles 'sopas con onda', y los chicos se lo tragan porque no conocen otra cosa mejor; urge darles tajadas para que comparen; porque nuestro paladar está hecho para gustar ambrosía, y quien prueba lo verdadero, lo bueno y lo bello, ya no quiere otra cosa, de modo que, afinado su gusto, ansiará el buen manjar, y un buen día, 'en un claro del bosque', y más pronto que tarde, hallará la fuente arcana que rebosa vida, alegre y divertida.
Dios, en cambio, no engaña; y, como Padre amoroso, siempre está enseñándonos. La Santina nos había acogido como una madre tierna, y, acto seguido, fuimos absorbidos por 'la nube', pasando de una luz esplendorosa a la más abrumadora oscuridad. Pero ese contratiempo se convirtió en una enseñanza, una metáfora para nuestro tiempo. De camino a Covadonga en la furgo yo había contado que hay un pueblo en la Maragatería donde sirven el cocido empezando por la carne y terminando por el caldo, y que eso venía del tiempo de la Reconquista, cuando los ataques eran por sorpresa y urgía estar bien alimentados. Y veo claramente que ahora estamos en la misma situación: Los mercaderes -señores de negro- engañan el hambre de felicidad de nuestros hijos dándoles 'sopas con onda', y los chicos se lo tragan porque no conocen otra cosa mejor; urge darles tajadas para que comparen; porque nuestro paladar está hecho para gustar ambrosía, y quien prueba lo verdadero, lo bueno y lo bello, ya no quiere otra cosa, de modo que, afinado su gusto, ansiará el buen manjar, y un buen día, 'en un claro del bosque', y más pronto que tarde, hallará la fuente arcana que rebosa vida, alegre y divertida.
El verano es idóneo para gozar del buen trato humano en armonía con la naturaleza; frente a la insulsa propuesta de los invasores (variaciones de cazar pokemons) nosotros podemos nutrir a nuestros jóvenes con manjares enjundiosos que les plenifiquen y robustezcan.
Con valentía y generosidad, este nuevo modo de vida es posible. Porque Dios, vivo y con un corazón ardiente, está a nuestro lado y de nuestra parte.
Y para terminar un chistecito:
Con valentía y generosidad, este nuevo modo de vida es posible. Porque Dios, vivo y con un corazón ardiente, está a nuestro lado y de nuestra parte.
Y para terminar un chistecito:
Andan ya revueltos en Castilla La Mancha; circula por aquí una 'encuesta-globo-sonda' pidiendo opinión sobre la independencia de esta comunidad, con capital en Toledo:
¿Qué opina Vd. sobre reclamar un Estado Manchego Independiente (EMI)? (Elija una respuesta):
- Si, hermoso.
- No, alhaja.
- Venga, bolo.
Un cordial y refrescante saludo.
Comentarios
Publicar un comentario